Automatización y obsolescencia humana

El proceso de automatización en el que estamos inmersos no tiene parangón. A diferencia de otros procesos de transformación acaecidos en el pasado, la singularidad de este momento es que los ordenadores están asumiendo una dimensión que hace un tiempo se pensaba que estaba reservada a los seres humanos: el trabajo intelectual. Y, ciertamente, lo están asumiendo de forma exponencial.

El objeto de esta entrada es abordar el impacto que este proceso está teniendo en nuestras habilidades como seres humanos, pues, hay elementos para pensar que (si no somos especialmente cautos) podemos acabar experimentando, si me lo permiten, una «obsolescencia humana» o «atrofia cognitiva».

Y, ciertamente, parece que de nosotros depende que no suceda.

Coste del despido, sesgos, ansarinos y anclas

  El pasado 15 de noviembre 2018 tuve oportunidad de presentar en la Universidad de Sevilla una ponencia en el seminario sobre “Pobreza en la ocupación y envejecimiento activo”, como parte del Congreso internacional “Instrumentos normativos para la mejora de las trayectorias laborales en el nuevo contexto demográfico, económico y tecnológico”. El título de mi intervención era el siguiente: «Temporalidad y calidad en el empleo: algunas propuestas de reforma«. Quiero […]