No sabemos que no sabemos. Y esto nos hace más propensos al error. Y lo más preocupante es que no somos conscientes de ello. Las implicaciones (personales y profesionales) de esta particularidad «tan humana» son de tal magnitud que acongoja que no le prestemos mayor atención. Obviamente, el mundo del Derecho no está exento de este fenómeno y sus implicaciones pueden ser particularmente inquietantes y profundas. Así que, si […]